lunes, 15 de septiembre de 2008

Valijas más, valijas menos

La campaña de Cris salió 4 veces más de lo declarado, así que el faltante de 800.000 dólares de la valija de Antonini no debe haber hecho mucha mella. Eso si,las audiencias del juicio por la valija de Antonini Wilson en Miami la pusieron a la presidenta y a los suyos con los nervios de punta, y es que los primeros testimonios que se escucharon en la corte hacen referencia a una trama oscura de relaciones entre funcionarios K y bolivarianos.

Uberti, único renunciante del escándalo, no era un funcionario de segunda línea en la realidad, si bien se desempeñaba como director del Organismo de Control de Concesiones Viales (OCCOVI), Uberti también venía cumpliendo un rol decisivo en las relaciones comerciales entre la Argentina y Venezuela. Era casi un embajador paralelo.

El gobierno debería explicar por qué este funcionario viajaba en un avión alquilado por Enarsa, pero en el que él decidió quién subía y quién no, estaba la valija en cuestión. Tendría que refutar la declaración de la mismísima secretaria de Uberti, Victoria Bereziuk, que confió a la Justicia que Antonini Wilson había estado en la Casa Rosada al día siguiente del escándalo.

Sin embargo el oficialismo grita al unísono que extraditen a Antonini, sabiendo que es tan imposible como una final en Tokio de Sacachispas con el Manchester United. Los Estados Unidos no extradita jamás a sus ciudadanos, ya que de lo contrario recorrerían los tribunales del planeta dando testimonio de sus desaguisados.

Quizás deberíamos romper relaciones con el Imperio del Mal, formar una triple alianza con Evo y Chávez y atacar algún McDonalds, o mandar a D'Elia o a Moreno a que lo cacheteen a Obama, digo, sería propio de la seriedad de las reacciones que tiene el oficialismo frente al tema.

Para el INDEC, creció el poder de compra y no hay indigentes. Que suerte que con los K Argentina es un país en serio.

Gustavo Aramburu
gleonar63@hotmail.com

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